CRMA EMILIO BIEL - Zaragoza, Zaragoza

LEIDY J. A.

Las trabajadoras son muy amables seguro que no tienen ninguna culpa y es lo que tienen para trabajar, pero la consulta, las instalaciones y el material dejan BASTANTE que desear.
Fui por aseguradora y si pagaba 20€ a parte me hacían un tratamiento no termine mis sesiones ni me encontraba cómoda

Nati R.

Un lugar bastante extraño al que no pienso volver...al entrar huele a polvo y antiguo. La decoración en bien peculiar...llena (bien llena) de cosas del mundo de los toros y fotos de mujeres y niños de la India...
Las chicas que trabajaban ahí daban algo de pena...porque no les trataban muy bien. No suelen durar mucho de todas formas, ya que cada X tiempo hay una cara distinta.
Además, por lo que aparece en otros comentarios negativos, no tienen nada de autocrítica y terminan sus respuestas con un 'hemos tomado medidas al respecto'...que suena como a amenaza. Imagino que así la gente tiene miedo de dejar luego su reseña negativa, quedándosele al sitio una puntuación que dista mucho de la realidad...vayan y vean.
El tratamiento en sí, sin más. Estás más tiempo solo en una sala que otra cosa. Y el trato...pues para qué comentar...acorde con la decoración.

TERE V.

He ido a este centro para un tratamiento y también mis dos hijas, una por esguince y otra por lesión de rodilla por la práctica del voley. Tengo experiencia y conocimiento de cómo tratan a los pacientes y solo puedo hablar maravillas de ellos. Son grandes profesionales que tratan muy bien y sus tratamientos son muy efectivos. Si no fuese así no volvería ni pondría en sus manos a mis hijas. Todos, Emilio, los fisioterapeutas y la chica de recepción son muy agradables y se preocupan de sus pacientes. Pongo está reseña porque no entiendo las reseñas que se están poniendo por algunas personas recientemente ya que veo mucha falsedad en ellas. MUCHAS GRACIAS por vuestro trato y profesionalidad.

PEDRO A. A. C.

Centro de fisioterapia muy recomendable. No eres un paciente, eres un amigo. Trato muy amable de todo el equipo, desde recepción, las chicas de fisio y los dos Emilios (Padre e Hijo). La experiencia es un grado y saben muy bien lo que hacen. Por supuesto que os recomendaré. Muy contento con el tratamiento y la magnífica atención.

Carlota C.

Volví de Italia de propio por un problema en el pie. Fui dos veces a urgencias y salí sin diagnóstico. Si no fuera por Emilio seguiría sin saber lo que tengo.
Las sesiones me han ido genial y voy a poder volver pronto. El trato ha sido inmejorable, todo el equipo es súper amable y se han implicado un montón con mi caso. Lo recomiendo sin dudarlo. 🥰

Nieves M.

Hoy he acudido a realizarme un tratamiento de magnetoterapia, y lamentablemente, la experiencia ha sido muy desagradable.

El procedimiento duraba 20 minutos, así que mientras me lo realizaban, estaba usando mi teléfono móvil. A los 10 minutos, un señor mayor (Emilio) entró y me dijo de manera brusca: "No puedes estar con el móvil mientras." Al salir, comentó en voz alta: "Tenéis que avisar de lo de los móviles, porque cualquier día vamos a tener una desgracia." Este comentario me pareció totalmente inapropiado, ya que no es tranquilizador para alguien que está recibiendo el tratamiento. NADIE ME AVISÓ DE ANTEMANO DE QUE NO SE PODÍA USAR EL TELÉFONO MÓVIL. SINO, OBVIAMENTE, LO HUBIERA APAGADO.

Inmediatamente apagué el móvil, y justo en ese momento, el aparato me dio un pinchazo que me dejó la zona dolorida.

Quiero destacar que el personal joven fue muy amable en todo momento, pero el señor mayor tuvo un trato muy poco respetuoso. Además, la señora de recepción tampoco escuchó lo que intentaba explicarles y, en lugar de intentar comprender, se mostró enfadada conmigo.

Es cierto que hay carteles que indican que no se debe usar el móvil, pero cualquier persona podría pensar que es una advertencia similar a la de los consultorios médicos, donde simplemente se solicita silenciarlo. En ningún lugar se especifica que el uso del móvil puede interferir con el tratamiento y representar un peligro. ADEMÁS, EL PERSONAL DEBERÍAN AVISAR NO ESPERAR QUE LA GENTE LO DEDUZCA. TAN PRONTO ME AVISARON, APAGUÉ EL MÓVIL.

Solo espero que el dolor que me dejó el pinchazo desaparezca pronto y que esta experiencia no le ocurra a nadie más. Por ello, dejo esta reseña, pues no han querido escuchar mi sugerencia de que incluyan una advertencia más clara en los carteles, como: "El uso de dispositivos móviles puede interferir con el tratamiento." Y que además, avisen, que no está de más.

En cualquier caso, en ningún momento se preocuparon por mi dolor causado por esta mala praxis. Es más, me llamaron luego por teléfono y me hablaron fatal.
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Al teléfono le dije 'Quizá piensa que soy estúpida por llevar el móvil conmigo encima, pero yo no soy fisioterapeuta y no sabía estas cosas'' y el señor entendió que le llamaba 'estúpido a él. Cuando por educación mínima, pese a todo, ni se me ocurre insultar a nadie. No es algo que vaya conmigo ni con los mínimos de educación que, por lo menos a mi, me han inculcado.

Increíble que tengan que ocurrir cosas así y que se hagan llamar profesionales...

Javier A.

Grandes profesionales, desde recepción hasta los fisios. Siempre con la alegría y tratándote de tu a tu. imposible no entablar conversación y acabando en amistad con ellos. Se te olvida porque vas allí, porque son muy amables y saben perfectamente como tratarte. He ido ya dos veces y da gusto ir.

Carlota C.

Muy poca higiene en general. Estuve 3 meses y nunca cambiaban las sabanas de las camillas de la sala grande. Habia mil pelos. No me transmite ninguna confianza. Además, habia muchísimos pacientes para tan pocos fisios y los pobres van desbordados. Buen trato los fisios más jóvenes, pero hay que darle una vuelta a la higiene.